Con los materiales siempre nobles que permiten la creación de la expresión artística: bronce, cerámica, madera, telas y con variadas técnicas convergen estas propuestas de artistas de Santiago de Cuba, La Habana y Camagüey, en un diálogo especial que se caracteriza por la intensidad de las formas, por el magnetismo de sus configuraciones y el dinamismo profundo de una creación emanada de la sensibilidad humana.